Los tratamientos con Radionúclidos permiten dirigir el tratamiento al órgano o sitio específico donde se quiere generar un efecto terapéutico. Se realiza administrando el radiofármaco (sustancia radiactiva) por vía oral, intravenosa o intracavitaria. Es así que se lo denomina Radioterapia metabólica. En los últimos años se ha acuñado el término de Teragnosis, haciendo referencia a la doble propiedad que presentan algunas de estos radiofármacos en emitir energía (Rayos Gamma) con la cual se pueden adquirir imágenes (Diagnóstico) y por otro lado emiten radiación (beta o alfa) capaz de generar daño en las células (Terapia). Un claro ejemplo de ello son los tratamientos con Yodo, en patología benigna o maligna de la glándula tiroides, en nuestro medio se realizan desde hace varias décadas.